Se han hallado cuatro antiguos enterramientos en un cementerio preincaico recientemente descubierto en el yacimiento arqueológico de Huaca Pucllana, situado en el barrio residencial de Miraflores, en la ciudad de Lima, capital de Perú. Los arqueólogos han señalado que la localización de estos restos humanos y del ajuar funerario con el que fueron enterrados sugiere que pertenecían a la clase alta de la cultura Ichma.
Respecto a la naturaleza de estos enterramientos, la arqueóloga Isabel Flores, que lleva investigando el yacimiento 35 años y es la directora del programa de Huaca Pucllana, ha declarado a Phys.org que “Hay cuatro enterramientos de individuos adultos, tres mujeres y un hombre, que vivieron entre los años 1000 y 1450 [durante la época en la que los Ichma habitaban en este lugar].” En Peru reports leemos que los restos humanos descubiertos se encontraban sentados en cuclillas “de cara al mar y rodeados de piezas cerámicas y textiles.”
Mirella Ganoza, la arqueóloga que descubrió los restos, ha declarado a La Prensa que “También encontramos en las tumbas instrumentos como agujas, madejas de hilo y piezas de tela, lo que nos indica que trabajaban en la industria textil.” También ha afirmado que “Nuestra hipótesis es que estaban involucrados en cuestiones políticas, religiosas o de alto rango. Este lugar no fue elegido al azar.”
La arqueóloga Mirella Ganoza examinando uno de los enterramientos descubiertos recientemente en el distrito de Miraflores, Lima, Perú. (Ángel Chávez/La Republica)
La cultura Ichma (también conocida como Ychma o Ychsma) fue una de las dos primeras grandes culturas (la otra fue la cultura Chancay) que surgió en la zona de Lima tras la caída del Imperio Wari. Su área de influencia se extendía desde el valle de Lurín al sur de Lima hasta el valle del Rímac más al norte, y se les conoce por haber construido y reformado muchas de las estructuras arqueológicas que se pueden encontrar actualmente en la provincia de Lima.
Dos importantes yacimientos arqueológicos atribuidos a la cultura Ichma son los de Puruchuco y Cajamarquilla. Se cree asimismo que los Ichma ocuparon Pachacámac, donde continuaron aumentando su influencia religiosa sobre la región y construyeron 16 pirámides. La cultura Ichma tocó a su fin en torno al año 1400, cuando fueron conquistados por los incas.
Según Flores, los Ichma no fueron los primeros en ocupar el emplazamiento de Hucaca Pucllana: la cultura Lima (100 d. C. – 650 d. C.) llegó primero y construyó la pirámide escalonada para realizar ofrendas a sus dioses. A la cultura Lima la siguieron los Wari, y finalmente los Ichma. Cuando los Ichma llegaron a este lugar, se asentaron en la cara occidental de la pirámide escalonada, donde se dice que “podían secar sus cosechas y en la que realizaban ofrendas de recipientes cerámicos y alimentos.”
La “gran” pirámide escalonada de Huaca Pucllana esta construida de adobe, mide 20 metros de altura y ocupa una superficie de más de seis hectáreas. Cuenta con siete plataformas, y Flores cree que los Ichma llevaban a cabo sacrificios humanos en su sexto nivel. También asegura que los Ichma sacrificaban ranas en este lugar, con la intención de complacer a sus dioses, que de esta forma traerían la lluvia.
Yacimiento arqueológico de Huaca Pucllana, distrito de Miraflores, Lima, Perú (CC BY 2.0)
Tanto Flores como Ganoza son cautas a la hora de plantear expectativas de nuevos descubrimientos en este yacimiento para el futuro. Como ha declarado Flores a El Universo: “Son las cuatro primeras tumbas de la cultura Ichma. Puede ser que hallemos más tumbas, a pesar de que este lugar sagrado ha sido saqueado desde la época de los (conquistadores) españoles.”
El reciente descubrimiento también ha permitido a la representante del Ministerio de Cultura peruano Crizia Málaga señalar que los trabajos de gestión y restauración que se han llevado a cabo en Huaca Pucllana han sido posibles gracias a las ganancias ingresadas por una compañía privada en concepto de venta de entradas y por la explotación de un restaurante situado en el lugar. Esta funcionaria del Ministerio de Cultura ha declarado a Peru Reports que “El modelo de cooperación entre lo público y lo privado funciona para la conservación de nuestro patrimonio, Huaca Pucllana es un buen ejemplo de ello.”
Esta afirmación ha sido realizada a raíz de la reciente revocación de una ley que “permitía a las compañías privadas gestionar y restaurar otros yacimientos arqueológicos de Perú,” lo que dejó al Ministerio de Cultura empeñado en encontrar la manera de “proteger los miles de yacimientos arqueológicos que el gobierno no puede investigar o proteger por falta de recursos.”