Trabajadores colocando tuberías para la compañía de gas Calidda en Chilca, que se encuentra a 37 millas (60 km) al sur de Lima, Perú, descubrieron recientemente los restos de ocho personas enterradas juntas en una tumba común de la cultura Chilca hace 800 años. Se encontraron enterrados con ellos ajuares exóticos para llevar al más allá, incluidos instrumentos musicales, comida y bolsas con hojas de coca (la base estimulante natural de la cocaína).
La tumba de la cultura Chilca no fue el primer hallazgo de Calidda
Esta no es la primera vez que los trabajadores de Calidda, que ha estado colocando tuberías en la región durante los últimos 20 años, descubren tesoros arqueológicos que arrojan luz sobre la rica historia prehispánica del Perú. De hecho, la empresa cuenta con un equipo de arqueólogos. Imagínese eso: ¡una empresa de tuberías que tiene un departamento de arqueología!
En el proceso de colocar casi 6000 millas (10,000 km) de oleoducto a través de la capital peruana de Lima y sus ciudades vecinas, a la compañía se le atribuye la cantidad de 300 descubrimientos arqueológicos, algunos de más de 2000 años. Y la empresa colombiana ha gastado 2 millones de dólares (1.708.000 euros) para “salvar” los hallazgos que ha realizado.
Uno de sus descubrimientos más interesantes en el pasado fue la excavación en 2018 de 30 cuerpos preincaicos en cuatro entierros, incluido el ajuar funerario de utensilios de cerámica. Dos años antes, en 2016, los trabajadores de la empresa se encontraron con los restos de agricultores inmigrantes chinos del siglo XIX. El Mail Online informó que Alexis Solis, un arqueólogo que trabaja para Calidda, dijo: “Lima literalmente se asienta sobre un banco cultural”, con una capa de historia encima de otra.
Uno de los enterramientos de la cultura Chilca descubiertos recientemente con una pieza de concha sepulcral. (Calidda)
El último hallazgo: restos humanos y bienes funerarios
Sin embargo, el descubrimiento más reciente en Chilca tendría que clasificarse como uno de los más fascinantes de la empresa. Los restos de adultos y niños de la cultura Chilca fueron envueltos en material vegetal y enterrados con mazorcas de maíz. Otros alimentos, utensilios e instrumentos de viento (incluidas flautas) se encontraron esparcidos alrededor de los cuerpos.
Las casas descubiertas en Chilca se remontan al 5800 a. C. y su historia conocida se remonta al 7000 a. C. El reciente descubrimiento de la cultura Chilca se remonta al año 1220 d.C., época en la que el Imperio Inca estaba en auge. Sin embargo, los arqueólogos han tenido cuidado de aclarar que la cultura Chilca era distinta de la cultura Inca. Algunos de los ocho muertos de Chilca habían sido enterrados con conchas en la cabeza y bolsas que contenían hojas de coca, tradicionalmente masticadas como estimulante por las poblaciones indígenas de la región.
“Es un hallazgo importante que nos da más información sobre la historia prehispánica de Chilca”, dijo Cecilia Carmago, otra arqueóloga del equipo de Calidda, citada en France 24.
Un vistazo al pasado ancestral de Lima
Lima está ubicada en el valle de un río andino y fue la base de varias civilizaciones humanas miles de años antes de la conquista española del Perú a principios del siglo XVI. Como tal, restos de cementerios, casas, edificios, caminos antiguos y canales de riego se encuentran esparcidos por la región. “La diferencia física entre el presente y la antigüedad es de unos pocos centímetros”, dijo Solís en una entrevista el año pasado.
Si bien la ley peruana exige que los descubrimientos arqueológicos sean reportados y entregados al Ministerio de Cultura del país, no siempre sucede. Una de las contravenciones más impactantes de esta ley ha sido el caso de un desarrollador inmobiliario en 2013 que destruyó una estructura piramidal de 4500 años de antigüedad en las afueras de Lima.
Reconstrucción de una de las pirámides de Aspero, un sitio del Precerámico Tardío bien estudiado de la antigua civilización Norte Chico, ubicado en la desembocadura del río Supe en la costa centro-norte del Perú. (Dravinia / CC BY-SA 4.0)
Un vistazo al pasado prehispánico de Perú
Piense en la historia peruana y lo que al instante le viene a la mente son el Imperio Inca y sus ruinas más famosas y mejor conservadas de Machu Pichu. Si bien los europeos denominan los viajes de finales del siglo XV y hasta el siglo XVI como la “Era de la Exploración”, la realidad es que las civilizaciones y culturas florecientes son anteriores a la llegada de los españoles y portugueses a Sudamerica. Si bien los respectivos viajes de Colón y Cortés abrieron el Nuevo Mundo al Viejo Mundo, fue un período de devastación y destrucción para los pueblos y tribus indígenas de esta región.
No hay duda de que la civilización Inca que floreció durante casi un siglo entre 1438 y 1532 fue el imperio prehispánico más rico y poderoso de América. Algunos historiadores sostienen que fue el estado más avanzado de las Américas precolombinas. Sus orígenes son aún más antiguos y se remontan al siglo XII cuando la tribu Inca estableció su capital en Cuzco.
Perú también ha sido el hogar de varias otras culturas prehispánicas que permanecieron aisladas de la expansión Inca, incluida una de las personas más antiguas del mundo, la gente del Norte Chico.
La cultura Chilca, a la que se ha atribuido el último descubrimiento arqueológico, se mantuvo distinta de otras culturas prehispánicas en Perú, incluidos los incas.
Imagen de Portada: Uno de los entierros de la cultura Chilca desenterrado accidentalmente por la empresa de gas Calidda en la ciudad de Chilca, a 37 millas (60 km) al sur de Lima, Perú. Fuente: Calidda