Un dramático video grabado en el Parque Nacional Masai Mara (Kenia) muestra la dureza de la naturaleza que no perdona a nadie, especialmente a los recién nacidos.
En el video se cuenta la historia del destino de una jirafa bebé cuando solo tenía unas pocas horas de vida.
Según Don Heyneke, fotógrafo profesional que también grabó el video, las jirafas necesitan alrededor de 10 horas para acostumbrarse al ambiente exterior. Durante este tiempo, no pueden moverse hábilmente, y aún más no pueden huir cuando se encuentran con depredadores.
Sin embargo, la jirafa tuvo mala suerte cuando fue descubierta por un león, junto con una manada de hienas hambrientas.
A pesar de los esfuerzos protectores de la madre y otros adultos de la manada, el ciervo bebé fue acorralado por el león en un acantilado, donde desafortunadamente cayó y quedó inmóvil. Inmediatamente, el león se abalanzó, agarró a su presa por el cuello y comenzó a arrastrarla a un lugar seguro.
Como si el desafortunado ciervo bebé fuera a convertirse en una comida para el león hambriento, de repente apareció la madre ciervo, se apresuró y se sacrificó para proteger al bebé ciervo.
Testigos dijeron que esta “batalla de vida o muerte” duró más de una hora y al final, la leona se rindió.
El cervatillo también pudo levantarse y sobrevivir gracias a su fuerza y determinación para no darse por vencido.
La jirafa (nombre científico Giraffa) es un género de mamíferos herbívoros del orden de los zuecos pares. Son los animales más altos de la tierra, superando a los elefantes y también a los rumiantes más grandes.
En consecuencia, el ciervo macho puede alcanzar una altura de 4,8 a 5,5 metros y pesar hasta 1.300 kg. El récord de la altura medida de una jirafa es de 5,87 metros.
La característica más especial de esta especie es su cuello extremadamente largo, que puede llegar a medir más de 2 metros. El cuello solo representa el 52-54% de la longitud de la columna vertebral de la jirafa, en comparación con el 27-33% en ungulados grandes similares.
El cuello largo es a la vez una herramienta de búsqueda de alimento y un arma defensiva para los ciervos porque les permite ver a los enemigos desde la distancia.
Las jirafas se consideran una de las especies más dóciles de las praderas africanas y muy rara vez atacan activamente a otros animales.
Su principal fuente de alimento son las hojas de acacia en altitudes que la mayoría de los otros herbívoros no pueden alcanzar. Esta especie suele beber grandes cantidades de agua de una vez y puede retener agua durante mucho tiempo en el cuerpo, por lo que pueden vivir en lugares áridos durante mucho tiempo.